La carne de cerdo es una de las más apreciadas y consumidas en todo el mundo por su fácil crianza, porque se pueden aprovechar todas sus partes para el consumo humano y por su gran versatilidad a la hora de prepararlo.
En esta ocasión os traemos una receta en la que utilizaremos un cochinillo o lechón, ya que su carne es muy tierna y la forma de prepararlo exige que el animal sea de un tamaño más bien pequeño.
Se trata del mundialmente conocido cochinillo asado al horno, preparado al modo tradicional de Segovia, es decir, entero, con su piel y con muy pocos ingredientes y especias para poder apreciar el sabor auténtico de esta delicada y sabrosa carne.
Animaos a hacerlo en casa, es más fácil de lo que uno se imagina y el resultado es sencillamente maravilloso, os aseguro que os encantará por su jugoso interior y su piel crujiente.
Ingredientes
- 1 cochinillo de 3 1/2 o 4 kilos
- 1/2 cabeza ajo
- 1/2 taza perejil fresco
- 1/2 vaso vinagre
- 1 vaso vino blanco
- 2 vasos agua
- 4 hojas laurel
- 1 ramillete romero fresco (o 1 cucharada rasa de romero deshidratado)
- Al gusto sal
- Al gusto pimienta negra
Instrucciones
- Precalentamos el horno a 180ºC.
- Pelamos el ajo y lo cortamos en trozos para poder machacarlos en un mortero junto con el perejil y el romero. En un bol mezclamos todos los líquidos, añadimos el majado de ajos y reservamos.
- Limpiamos bien el cochinillo tanto por dentro como por fuera, cubrimos las orejas y el rabo con papel de aluminio para evitar que se quemen y lo colocamos boca abajo sobre una fuente para hornear (si es en una fuente de barro, mucho mejor). Lo regamos con un par de cucharones del majado que preparamos anteriormente y lo salpimentamos al gusto (hay que ser generosos).
- Lo metemos en el horno hacia la parte media/baja y lo dejamos a 160ºC durante un mínimo de 2 horas, aunque podría necesitar 1/2 hora más dependiendo de su tamaño, del horno utilizado y de otras variantes. Durante el tiempo de horneado iremos añadiendo un cucharón del majado cada 15 minutos para que la carne nos quede bien jugosa y tierna.
- Para saber si el cochinillo está en su punto, intentamos separar la carne del hueso, si se suelta con facilidad y sin necesidad de cortar, estará listo para servir.
Notas de la receta
Lo podemos acompañar con patatas fondant o asadas, un rico puré de manzana, un original y elegante puré de castañas o una combinación de varios de ellos.